domingo, 8 de mayo de 2011

Persiana Americana

  Por Leo Timossi                                                                            leotimossi@hotmail.com                                                                                                                       

Es difícil de creer.  Es una condena agradable. Es como un desgaste, una necesidad más que un deseo. ¿Estamos al borde de la cornisa?

No es capricho haber elegido estas notas al comienzo de la reflexión. Estudiantes vive su peor momento deportivo desde aquella despedida cordial de Sensini que se antoja muy lejana. Más que añeja e irreproducible para este hincha voraz que es hoy el rojiblanco será la situación de los Craviotto, los Malbernat. La presión ejercida sobre este plantel terminó sacando de quicio. Un equipo que cambió prácticamente todos los jugadores (del título del 2006, solo quedan 3: Verón, Braña y Benítez) y siempre respondió. La gente, caprichosa, como un nene que no entiende que ya es hora de salir del pelotero, exige ganar siempre. Y hoy se encuentra con la desagradable realidad de entender que todo proceso tiene sus baches. Y que hoy por hoy, a pesar de ser el campeón, Estudiantes no es el mejor equipo del fútbol argentino.

La Bruja sería intervenido quirúgicamente
para recuperar su tobillo.
Quizá hacer un minucioso detalle del partido del jueves o el  jugado esta tarde ilustre más estás palabras, pero me parece innecesario. Me tomo el atrevimiento de pensar que si alguien está leyendo esta nota, es porque observó los dos partidos. No teman amigos, no tengo ninguna objeción en decir que a mi entender, Estudiantes mereció ganar ambos encuentros. No me da miedo decir, no obstante, que Estudiantes tiene un grave déficit en la generación de juego. Esta falta de gol no se le puede achacar a los delanteros (Colón, Cerro, Vélez, Cerro, Lanús. Cinco partidos sin goles) ya que ni siquiera cuentan con chances para dilapidar. Verón, probablemente junto a Riquelme, el mejor generador de juego del fútbol nacional, no disputó ninguno de los dos partidos. Un cuadro gripal y una lesión en el tobillo que parece encaminarse a una intervención quirúrgica dejaron al equipo flaco de su mejor asistidor. No obstante, el nivel de la Bruja no era bueno. La lesión limita sus movimientos y cuando él juega debajo de su nivel, el equipo lo nota.  Benítez, su reemplazante natural, mezcla momentos de absoluta brillantez con ratos de imprecisión impropios de un futbolista con un guante en el pie. Enzo Pérez, dueño de un despliegue y una velocidad con pelota en movimiento sencillamente impresionante, hoy no logra desequilibrar, y quizá se lo ve algo individualista. Barrientos es puro intento. En Paraguay no participó, después de su flojo partido con Vélez. Esta tarde, su entrada le aporto más verticalidad y pase a un equipo en la nebulosa. Su déficit está en que seguramente el próximo partido su nivel vuelva a decaer.

Dejaré a otros, mucho más exitistas, mucho más contaminados por las mieles del éxito, que cuestionen al técnico por la decisión de Roncaglia de patear aquel final que hoy es definitivo. Berizzo designó a quien posiblemente, junto a N. Benítez, mostró su peor cara este semestre, para una definición decisiva. ¿Es esta una cuestión reprobable? No. Ni yo ni ustedes, me tomo el enorme atrevimiento de  acusarlos, tenía conocimiento de las virtudes como shoteador de Roncaglia. Ninguno se tomó el trabajo de averiguar si este tibio defensor surgido de la cantera xeneize había practicado en los entrenamientos y los había convertido a todos. Quizá, en aquel momento comenzado el partido, personalmente y sin encontrar eco en el living de casa, me cuestioné acerca de su titularidad en un encuentro decisivo, en una Copa Libertadores que significa tanto para este club.
Stefanatto, de flojo partido, se lleva la pelota ante la marca de Pizarro.

Esta tarde, en una nueva cita con la inefectividad y la creación de chances de gol, Estudiantes parece haberse despedido del torneo. El hincha ya siente el desgano, yo invito a creer en la próxima semana. Pero este equipo no deja ilusiones de tener un plan para revertir esta mala racha. Y eso le costó bajar el jueves la persiana americana.

2 comentarios:

  1. creo que coincido con el hecho del deficit de generacion de juego, pero hago incapie en la falta de claridad en la deficion de la jugada, y la crisis q sufre el equipo en la ultima linea, si bien ha tenido grandes momentos, ha sido un denominador comun de varios partidos. tampoco podemos pretender que un tecnico que agarro un equipo ya armado y ademas con el embion de haber sido el ultimo campeon, iguale los resultados obtenidos, ese hecho, a mi entender es que no ve la gente, que pide a gritos que de un paso al costado, pero se olvidan q no tuvo ni una pretemporada con sus refuerzos, y agarro un equipo con pleno ruedo

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  2. Mira leo ,antes del minuto 88 dije : hay 4 jugadores que no pueden patear un penal ( Desabato ,Fedefernandez ,Re y Roncaglia) hasta me anime a decir q iberbia estaba por delante de ellos . En el caso de tener que recurrir a los defensores hay q ponerlos por sentimiento y amor a los colores ,yo hubiese puesto primero al chavo ,dsp a fernandez despues a re y como ultimo a roncaglia , hubiese preferido que patee orion antes que roncaglia . Jugadores en el banco de buen pie como barrientos se trajeron uhn mate de recuerdo ,porque de jugar ni hablemos . A berisso no se le ocurrio hacer cambios para que pateen penales , ni lo que tendria uqe haber hecho IR A BUSCAR EL PARTIDO , porque somos estudiantes ,no jugamos la libertadores para patear penales sino para ganarla , sino preguntenle a cruzeiro . Pero bueno ,este tipo parece que le da la cara para seguir rompiendo records negativos y la dirigencia no lo piensa hechar ,y creo q es hora de decirle de buena manera que de un paso al costado . Un abrazo Joaco Aberastain

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